lunes, 16 de abril de 2012

EL BESO DE LA MUJER ARAÑA

Septiembre, octubre, noviembre, diciembre. Claudio G termina el secundario. Me invita a la entrega de diplomas. Sé que Graciela M va a estar presente en el evento. Claudio no está enterado de lo que pasó hace tres meses entre su madre y yo. Dudo. Finalmente acepto la invitación. Soy un cervatillo, pero no por eso voy a esconderme en el bosque.

Claudio me presta una camisa. Blanca. No recuerdo si yo se la pido o si él me sugiere que la use para la ocasión. En aquel entonces, soy bastante desprolijo en el vestir. Medio hippie. Pelo largo, florecido, siempre atado. Ropa medio rota, medio estirada. Hoy día uso camisa porque mi capitán me obliga. Pero terminé tomándole el gusto. Me siento cómodo y me agrada cómo me veo. Me imagino que soy el cantante de Morphine, antes de que vistiera de mortaja. En aquel entonces, ni escucho Morphine ni me siento cómodo en camisa. Es más, es la segunda vez que me pongo una en mi vida. La primera fue para la comunión.

Los dos de camisa blanca, como hermanitos. Inocentes palomitas. Llegamos al colegio. Nos recibe Graciela. Creo que no sabía que yo acudiría al evento. Me saluda con cara de poker, pero con un brillo furtivo en los ojos. Tiene una cámara.

—¡Foto! —nos dice. 

Posamos. Sonreímos. Flash.

Enseguida, Claudio se distrae saludando a compañeros. Y de a poco se va alejando, dejándonos solos a su madre y a mí. Graciela rompe el silencio incómodo diciéndome que estoy elegante.

Me río.

—¡Mentira!

Se ríe. Parece que le hubieran desatado un nudo en un lugar incierto, entre pecho, hombros, espalda.

—Sos terrible, eh… —me dice—. ¡Te hablo en serio! Estás elegante, la camisa te queda muy bien.

Hago una mueca y miro hacia el escenario, en donde los pibes se empiezan a agrupar.

El evento, aburridísimo, claro. Álvarez, y pasa Álvarez. Benítez, y pasa Benítez. G, y pasa Claudio. Me paro en una silla para verlo mejor. Y Graciela, por sorpresa, me saca la foto que un año después pondrá en un altar, con velas y un mechón de mi cabello.

—¿Vamos a mi casa a tomar unos mates? —nos invita Graciela cuando termina la entrega de diplomas. Ambos accedemos. Pero después de los primeros mates, unos compañeros de escuela pasan por el departamento buscando a Claudio.

—Bancame que bajo un toque y arreglo con los pibes para hoy a la noche —me dice—. No te molesta, ¿no?

Pongo cara de ni ahí y niego con la cabeza.

Claudio señala a Graciela con el pulgar.

—Sé que ella es insoportable, pero bancátela que son unos minutos nomás.

Graciela y yo nos reímos.

—Andá, dejalo solo a tu amigo, descortés —dice ella.

—No lo dejo solo —dice Claudio—. Lo dejo mal acompañado.

Y sale.

Ahora estoy alerta. Hoy no soy cervatillo, soy gato. Laxo, sentado en la cama, recostado contra unos almohadones apoyados en la pared; pero con los músculos preparados para alejarme con cinco saltos largos y arrojarme por la ventana ante la primera amenaza.

Graciela, a mi lado, en silencio, ceba un mate, me lo tiende. Mira un punto indeterminado, en el piso.

Yo estoy jugando al ajedrez. Me imagino todas las frases con las que puede abordarme. Tengo planificadas las respuestas para cada una de ellas. Para algunas, tengo ligeras variantes. Las sopeso. Me quedo con las más apropiadas. Las que ponen un límite firme lastimando lo menos posible. Me adelanto algunas jugadas. Imagino sus potenciales contra-respuestas. E ideo respuestas para ellas.

Termino el mate. Se lo tiendo. Y Graciela hace su movida. Atraviesa mis defensas. Sortea todos los obstáculos. Porque su táctica es otra. Hoy Graciela juega otro juego. Su mano no recibe el mate, se apoya suave en mi rostro. Y sus labios en los míos.

Asalto directo al cuerpo.

Inútil, mi intelecto queda girando sobre sí mismo, como un trompo.

Jaque Mate.

11 comentarios:

  1. (te contestaría el mensaje, pero no tengo crédito, así que conectate, zapato)

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  2. ABRAZO PROFEZZZOR,NUNCA LEO NADA PERO PASO PARA VER LAS FIGURITAS,LA ARAÑA,LA MAMA DE PSICOSIS,MUY BUENAS ILUSTRACIONES DE LO KE SUPONGO,DEBEN SER BUENOS ESCRITOS.
    ME VOY PORKE ME CORRE EL TIEMPO CON UNA PELUCA DE MI TIA ,CUCHILLO EN MANOS....ABRAZO.

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  3. OK! supo que hacer.. derrumbo tus estrategias :)

    Igual no me gusta ella (me siento madre protectora)

    Rami

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  4. Algún día todos dejamos los pantalones de bambula y pasamos a las camisas, remeras de pique, pullovers de bremer y zapatos de cuero... Es el rito iniciatico de nuestra sociedad moderna.

    Me gusta la actitud de la señora, se baja los pantalones y se echa un cago arriba del tablero...

    Muy bueno. Saludos.

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  5. Tanto ajedrez te quema la cabeza. Te van al cuerpo y te inutilizan. Abrazo.

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  6. no tenemos todas las respuestas, por más que intentemos prepararnos con todas las variantes...
    Esa mujer me hace acordar a la mamá de Stifler... aunque calculo que no debe ser así, no?
    Besotes :)

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  7. Guille:
    la adopción es una opción noble aunque engorrosa no? mi reflexion viene por el lado de la injusticia de la naturaleza, o como algun religioso fervoroso podria decir que es algo que no merece y "DIOS" lo decidió asi.
    Y si, me sale el perfil maternal o hermana mayor! no me gusta Graciela M para vos, jajaja eso te hubiera dicho


    Rami

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  8. Me hiciste pensar en las miles de estrategias y tácticas (si es que existe una diferencia entre estas palabras) que armamos ante cualquier situación, y en cómo las situaciones nos deshacen a pedazos todos los planes. Por suerte, digo.
    Un abrazo.
    HD

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  9. El famoso truco del mate jaque mate... las mujeres son sabias y actúan antes de que se inicie el proceso de pensamiento, cuando nosotros pensamos la e de la palabra estrategia, ellas ya hicieron su movimiento.
    En cuanto al altar y el mechón de pelo... bueno... es una linda señal de que la chica estaba entusiasmada... es eso, el amor libre o el celibato.

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  10. Gabriela: ¡Boludita vos! Jajaja.

    STHEPEN CURE: ¿Pasás a ver las figuritas? Jajaja.
    ¡Abrazo, señor!

    Ramita: Jajaja. ¡No sobreprotejas al niño que yo fuí!

    Mateo: Jajaja. Sutil alegoría la tuya. Me gusta.
    Abrazo y gracias por pasar.

    Dany: Así es, si el ataque al cuerpo es bueno, el intelecto queda fuera de juego.
    Abrazo y gracias por pasar.

    Dana Eva: No tengo el gusto de conocer a la madre de Stifler, no he visto American Pie. ¿Cómo era la madre de Stifler? ¿Ah?
    Besotes para ti y gracias por pasar.

    Ramita II: La adopción es una opción noble, claro. Y lamentablemente (o no) en la naturaleza no hay justicia o injusticia, y hay cosas que nada tienen que ver con el merecimiento. Mandale un abrazo fuerte a tu amiga.
    Oh, te acepto de hermana mayor, ¡pero no seas mi madre!
    A mí tampoco me gusta Graciela M para mí. Mucho menos ahora, que podría ser mi abuela.
    Abrazo y gracias por pasar.

    Humberto Dib: Por suerte, sí, jajaja. Aunque depende de la situación, claro.
    Abrazo y gracias por pasar.

    Alejandro Cossavella: ¿Entusiasmada? Jajaja. Vaya eufemismo...
    Abrazo y gracias por pasar.

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