domingo, 5 de agosto de 2012

JUDÁ SE GARCHA A SU NUERA

      Génesis, capítulo 38.

   Judá se casó con Sua, y tuvo con ella tres hijos: Er, Onán y Sela.
   Y tomó mujer para Er, su primogénito, la cual se llamaba Tamar.
   Pero Er era malo a los ojos de Jehová, y Jehová lo mató (1) —toda esa sanata de que Dios es Amor, la inventaron los cristianos muchos años después—.
   Entonces, Judá dijo a Onán, su segundo hijo:
   —Cumple tu deber de cuñado: cógete a la mujer de tu hermano. (2)
  Porque era costumbre entre los hebreos de esa época que al quedar viuda una mujer sin haber tenido hijos, su cuñado se la empernara para dejarla embarazada y así dar linaje a su hermano. El hijo nacido de esta unión era considerado descendencia del difunto. (3)
  Este es el famoso Onán, de cuyo nombre viene la palabra onanismo. Pero es un error pensar que el pecado de Onán era masturbarse. El pecado de Onán era que cuando se garchaba a su cuñada, como no quería dar linaje a su hermano, acababa afuera. Se ayudaba con la mano, claro, pero ese no era el punto. (4)
   Hay que tener en cuenta que, si Tamar tenía hijos, la herencia de Judá, en el futuro, habría de dividirse en tres partes. Caso contrario, la herencia se dividiría entre Onán y Sela, los dos hermanos sobrevivientes. Es probable que esa haya sido la razón por la que Onán vertía en tierra: quería cobrar una tajada mayor.
  Era malo a los ojos de jehová lo que hacía, de modo que le mató a él también.
  —Hagamos una cosa —dijo, entonces, Judá a Tamar—: aguantá hasta que mi pibe más chico crezca y tenga edad como para empomarte. ¿O.K.? (5)
   —O.K. —dijo Tamar.
  Pero el tiempo pasó y, cuando Sela tuvo edad suficiente, Judá se re colgó y no lo envió a Tamar para que se la garchara.
   Despechada por esto, Tamar urdió un plan. Se sacó la ropa de viuda, se tapó la jeta con un velo y se sentó junto a un camino por el que sabía que pasaría Judá. Y cuando Judá la vio, la confundió con una puta. (6)
   —¡Ea pues, ruégote me dejes que te coja! —le dijo.
   —¿Qué me darás a cambio? —preguntó ella.
   —Cuando llegue a casa, te mando un cabrito —dijo él.
   —¿Me vas a dejar algo de garantía hasta que me lo mandes?
   —¿Qué querés que te deje?
   —Tu sello, tu cordoncillo y el báculo que traes en la mano.
   —O.K. —dijo él. Se la garchó y le dejó las cosas.
  Más tarde, mandó a un amigo con el cabrito para recuperar sus pertenencias. Pero el tipo no encontró a nadie.
  —¿Dónde está la puta que paraba acá? —preguntó a los hombres del lugar.
   —Acá no paraba ninguna puta —respondieron ellos. (7)
  Así que el tipo se volvió con el cabrito y sin haber recobrado los objetos.
 Pasaron tres meses y llegó a Judá la noticia de que Tamar estaba embarazada.
  —Tu nuera ha estado fornicando —le dijeron—. Y he aquí también que está preñada de sus fornicaciones.
   —¡Sacadla para que sea quemada! —dijo Judá.
  Tomaron, pues, a Tamar para llevarla a la hoguera. Pero ella envió a decir a su suegro:
   —Del varón cuyas son estas cosas, yo estoy preñada. Ruégote veas de quién son.
   Judá reconoció sus pertenencias.
  —Déjenla —dijo—. La mina tiene razón. Yo estuve flojo: le había prometido a mi hijo y se me re pasó. (8)
   Tamar parió mellizos. Y he aquí otra historia de sustituciones. En medio del parto, uno de los pibes asomó una manito por la concha. La partera le ató un piolín para identificar al primogénito. Pero el pibe retiró la mano y el que salió primero fue el otro.
   —¿Cómo te rompiste paso? —le dijo su madre. Y lo llamó Farés, que significa irrupción. (9)

      (1) Génesis 38:7
      (2) Génesis 38:8
      (3) Deuteronomio 25:5, 6 
      (4) Génesis 38:9
      (5) Génesis 38:11
      (6) Génesis 38:14, 15
      (7) Génesis 38:21
      (8) Génesis 38:26
      (9) Génesis 38:28, 29

5 comentarios:

  1. ¿Cómo que asomó la manito y le ataron un piolín? Eso es bastante inverosímil; ya no creía mucho en lo de separar las aguas y las siete plagas de Egipto y la serpiente parlante... Pero con esto se fueron a la bosta.

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    1. Títeres de la Vagina, obra de teatro de la época, antecesora de monólogos de la vagina.

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    2. Tragedias: funciones de tres a seis días al mes

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  2. y si le pones títulos tipo teatro de revistas esas es buena guille: "las tortas de harinas los pones calientes", oh este "el requeson de judas se lo dio a su nuera". "mas respeto que soy hermana-madre-abuela","mira pa abajo que tengo este cabrito peludo para rebaño"

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  3. Mateo: Eso: asomó la manito y le ataron un piolín. Necio, incrédulo: el Reino de los Cielos jamás será tuyo.

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