domingo, 16 de marzo de 2014

PERROS LAMAN TU SANGRE

Primer Libro de los Reyes, capítulos 21 y 22.


A pesar de la gran exhibición del poder de Jehová hecha por Elías en su duelo con los profetas de Baal, los hebreos, obstinados como ellos solos, seguían adorando a otros dioses y cometiendo vilezas.

Y Acab, rey de Israel, incitado por su mujer Jezabel, era el más vil de todos. (1)

Por esto, Jehová maldijo a Acab por boca de Elías, diciendo: ¡Perros lamerán tu sangre! (2)

Tres años después de esta maldición, Acab partió a la guerra contra Siria para intentar recuperar el dominio de Ramot-galaad, ciudad que antaño perteneciera a Israel. En esta campaña perdió la vida, alcanzado por una flecha. Y corrió la sangre de su herida por el fondo de su carro.

Más tarde, cuando lavaron el carro en el estanque de Samaria, los perros lamieron su sangre, conforme a la palabra que Jehová había hablado.

También las rameras se bañaban allí. (3)


(1) 1° Reyes 21:25
(2) 1° Reyes 21:17-19
(3) 1° Reyes 22:38

3 comentarios:

  1. Te lamen los perros, se bañan las rameras.No sabia que en la biblia había un spa.

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  2. ¿Tres años para cumplir con una maldición? Que ineficiencia. Encima una maldición estúpida a mas no poder.

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  3. José Gabriel: Jajaja. ¡Me has hecho reír con tu comentario!
    Sería bueno que fueran las rameras quienes te lamieran.

    Señor Potoca: La venganza es un plato que se sirve frío.

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